Bajar la voz para escuchar mejor

El arte de captar la atención.

Durante una discusión la tendencia para ser escuchado -o imponer una idea- es levantar el tono de voz. Lo cierto es que la mejor estrategia en ese contexto es bajar el tono de voz. De ese modo se irá ganando la atención hasta ser escuchado. Te invito a experimentarlo en la próxima oportunidad para comprobar lo expuesto aquí.

Como empresa, para comunicarme también tengo que bajar el tono de voz. Primero, escuchándome a mí mismo e identificar y tener la certeza de lo que quiero o debo decir. El paso siguiente es identificar a quién decírselo. En otras palabras, tener en claro lo que quiero comunicar de mis productos o servicios, la imagen que quiero transmitir y, finalmente, cual es el mercado al que voy a dirigirme.

El identificar estos aspectos hará más fácil la incorporación de un servicio profesional de comunicación publicitaria, diseño gráfico, RRPP o prensa, quienes podrán guiarme en el cómo, cuándo y dónde publicar mi mensaje.

¿Por dónde empiezo?

Las preguntas llevan de un modo natural a buscar.
El ejercicio de buscar es parte del aprendizaje.


Como empresario tengo algunas preguntas que -aunque parecen obvias- son necesarias: ¿Qué debo hacer para vender más? ¿Cómo posicionar mejor mis productos o servicios? ¿Cómo fortalecer la imagen de mi empresa o la marca de mis productos?

Las respuestas a estas preguntas son: darme a conocer, que sepan quien soy y qué hago y, esencialmente, comunicarme.

¿Cómo puedo comunicarme de un modo que me vean entre tantos mensajes, entre tanta distracción, ruido e información?

Algunos consejos sencillos pero muy útiles:
1) Debo tener en claro lo que quiero decir.
2) Saber a quién decirlo.
3) Cuando es oportuno decirlo.
4) Cómo decirlo, y
5) Dónde decirlo.

Tener en claro estos aspectos me ayudarán a comunicarme correctamente.
Iremos desarrollando estos puntos y sus variantes en las próximas publicaciones. Por lo pronto puedo ir haciéndome estas preguntas y comenzar a buscar las respuestas.